Hace poco más de un mes que aterricé en Bolivia. Era la primera vez que iba, y me sorprendió su riqueza cultural y natural. Torotoro fue mi hogar durante unos días. Un pequeño pueblo donde el tiempo parecía que se había detenido, enclavado en un paisaje montañoso a 3000 metros de altura, dónde vivieron los dinosaurios. Aquí vienen paleontólogos de todas las partes del mundo a explorar sus cañones, cuevas misteriosas, el cementerio de tortugas y ver y contabilizar las huellas de dinosaurios.
Fue aquí también dónde descubrí la chicha boliviana, que es mucho más que una bebida tradicional; es un símbolo de la historia y la cultura del país, donde las mujeres tienen un rol fundamental. Con unas raíces que se remontan a las antiguas civilizaciones andinas, esta bebida ha sido una parte importante en la vida social, económica y religiosa de Bolivia durante siglos.
¿Cuáles son sus orígenes?
La historia de la chicha en Bolivia comienza con los pueblos indígenas. Los aimaras, quechuas y otros grupos andinos ya preparaban esta bebida fermentada a base de maíz. Esta bebida esta ligada a la espiritualidad y simbolizaba la fertilidad y la abundancia de la Madre Tierra (Pachamama). Beber esta bebida establecía una conexión profunda con la tierra. Además, durante los actos ceremoniales, la chicha se utilizaba como ofrenda en agradecimiento a los apus (espíritus de las montañas) y a la Pachamama.
¿Cómo se elaboraba antiguamente?
Mucho trabajo de mandíbula. Las mujeres eran las que se encargaban de ablandar el maíz en una olla y luego masticarlo. Después lo escupen dentro de una vasija de barro, donde daba lugar la fermentación. No suena muy bien, lo sé, pero tiene su explicación. La masticación del maíz acelera la fermentación a causa de las bacterias de la saliva. Pero que no cunda el pánico, estas bacterias de la saliva al final las mataban, ya que una vez fermentado el maíz se hierve durante cuatro horas para dar lugar a una bebida con poco alcohol, y embriagadora. Esta era tomada en pequeñas calabazas pulidas que corrían de mano en mano como símbolo de amistad.
¿De dónde viene su nombre?
Las raíces del nombre, según la Real Academia Española, la palabra “chicha” proviene de la voz aborigen “Chichab”; que significa “maíz”.
Una bebida que trasciende en el tiempo
A día de hoy, la chicha boliviana se sigue elaborando y está profundamente arraigada a la cultura andina. De hecho, yo tuve la oportunidad de ver como la elaboraban de la forma más tradicional.
¿Cómo es el proceso actual de elaboración de la chicha boliviana?
Muy similar al ancestral, a excepción de la masticación del maíz, que no se suele llevar a cabo. Los pasos para elaborar esta bebida suelen ser los siguientes:
Selección y preparado del maíz
El maíz para elaborar la chicha suele ser de una variedad especial, blanco o morado. Este se limpia para eliminar paja, arena, piedras..y se remoja en agua durante varias horas para ablandarlo.
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Cocción del Maíz
Ya sea molido o directamente después del remojo, se cocina en ollas de barro con agua durante varias horas. De esta forma se liberan todos los sabores y nutrientes al agua formando una especie de pasta o de sopa muy espesa.
Proceso de fermentación
Este es el momento en el que los azúcares del maíz se transforman en alcohol. Después de dejar enfriar esta “sopa” se traslada a grandes tinajas de barro donde se inicia la fermentación. En ocasiones para acelerar el proceso le añaden caña de azúcar, levaduras o frutas. La duración de la fermentación puede variar entre un par de días y una semana, dependiendo de la temperatura y el tipo de chicha que se desee elaborar.
Filtrado y almacenamiento
Una vez completada la fermentación, la chicha se filtra para eliminar restos sólidos y se almacena en recipientes más pequeños o se deja en las tinajas, dependiendo de la tradición local. En algunos casos, se sirve directamente de los recipientes de fermentación, manteniendo el proceso de fermentación activo hasta el momento del consumo.
¡A disfrutarla!
La chicha se bebe fresca, en fiestas y celebraciones, y se sirve en calabazas pulidas o jarras de barro. Es una bebida que se comparte, por lo que todos beben de los mismos recipientes por turnos.